Hoy en día se sabe que el aceite natural de coco ayuda a mejorar la
apariencia del cabello, pero también ayuda al sano crecimiento y desarrollo de
éste.
El aceite de coco es un aceite comestible extraído del coco
maduro; tiene numerosas aplicaciones no tan sólo en la industria farmacéutica y
alimentaria, sino que también como remedio natural.
El aceite de coco y nuestro cabello
Muchas veces nuestro cabello se ve deteriorado por el mal
cuidado que le ofrecemos, ya sea por un uso excesivo de secadores o de
planchas, como también por tintes agresivos, cepillados fuertes… por numerosos
motivos. Este aceite nos ayuda a mantener el crecimiento de nuestro pelo más
sano, además de ofrecernos un aspecto más brillante. Está comprobado que es un
excelente acondicionador y que induce a un re-crecimiento del caballo dañado
aportándole numerosas proteínas esenciales para nutrir el cuero cabelludo
dañado.
Este aceite se aplica normalmente por vía tópica estimulando
así los folículos del pelo. Podemos aplicarlo después del lavado del cabello
cuando todavía está húmedo. Debemos utilizar media o una cucharada de este
aceite para frotar el cabello, pero sin dejar una apariencia aceitosa, por lo
que debemos evitar aplicar el aceite en las raíces.
Propiedades del aceite de coco
Este aceite tiene numerosas propiedades: calmantes,
regenerativas, es un buen oxidante, antibacterial y anti-hongos. Junto con
todas estas propiedades, el aceite de coco previne de la aparición de caspa.
Aunque el aceite de coco es muy común encontrarlo en el
mercado, también se puede elaborar en casa, por ello os dejo un vídeo de
demostración para su elaboración:
Pero el coco además de tener una gran utilidad para el
cabello, tiene innumerables propiedades beneficiosas para nuestro organismo.
Esta fruta contiene abundante agua, el agua de coco, que posee vitamina B,
calcio, potasio y sodio entre otros minerales. Todos estos minerales ayudan en
nuestro cuerpo a restaurar los electrolitos que perdemos en la sudoración.
Además también ayuda al sistema nervioso y muscular, es un beneficioso alimento
para los huesos por su contenido en calcio fósforo y magnesio; ayuda a combatir
los parásitos intestinales como las lombrices; favorece en la formación del
esmalte dentario en la época de dentición infantil; ayuda a combatir la
osteoporosis…
Como podemos comprobar, el coco tiene numerosas utilidades
en nuestra vida, por lo que debemos incluirlo más a menudo en nuestra dieta.
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